Divago y llego
a ese mundo remoto
de muñecas de trapo
con cabellos de lana ensortijada.
A las tardes de invierno
con dibujos en vidrios empañados.
Regreso al tiempo
de inocentes insectos atrapados
en frascos transparentes.
A veranos de siestas en el huerto…
Y al temor a crecer,
tan parecido
a este de ya no ser
o ser
entre los muertos.
Julia Cerles
Madre mía, Julia, que poema tan bello.
ResponderEliminarEse temor a ser entre los muertos que todos compartimos, ese miedo a no ser, a la visita ineludible...Sin embargo amiga, nuestro ser sigue siendo al otro lado.
Un fuerte abrazo.
Bellísimo poema amiga Julia. Como recuerdo esos garabatos dibujados en el vaho que le echábamos a los critales, y mí madre que se enfadaba con nosotros... Todo tiende a traer recuerdos a nuestra mente. Las siesatas en el huerto, bajo el naranjo... Gracias por traerlas de nuevo a mí memoria Julia. Un abrazo muy fuerte, amiga mía. (Y sobre los ositos... ¡déjalos los dos! jejejeje).
ResponderEliminarQué belleza, Julia, qué triste melancolía...
ResponderEliminarTe siento tan cercana a mis sentimientos, a mis sueños...
Un gran placer encontrarte. Y un enorme abrazo hasta tu-mi otoño.
Soco
Qué sensibilidad plena de belleza... me estremeces, amiga mía. ¡qué suerte haberte encontrado por estos mundos!
ResponderEliminarAbrazos desde mi naciente primavera
Grato saberte de nuevo cerca.
ResponderEliminarHermoso lo que has compartido !!!
Cariños
Que bello amiga
ResponderEliminarCon tus palabras llenas de sentimientos y recuerdos , las horas olvidadas
llevo unos dias sin entrar y me encuentro con esta belleza que engancha
gracias Julia por compartir tus momentos
un cálido abrazo
Estimada y apreciada JULIA
ResponderEliminarEn esta semana donde se acunan tantos sentires, deseo la disfrutes de acuerdo a tus intimas creencias.
Nos veremos el domingo de Pascuas!!!
Cariños
Un hermoso poema Julia.
ResponderEliminarVolver al centro de la infancia y seguir ahí, tal vez venza a la muerte.
Un beso
Hola, Julia. Llevaba días sin pasar por tu rincón pues no anduve por aquí. Tanto en este poema como en el anterior tocas el tema de la muerte, esa que forma parte de la vida pero que no llegamos a aceptar, sobre todo cuando se nos van los seres queridos. Algún día nos tocará a nosotras, mientras tanto sigamos disfrutando de tus poemas.
ResponderEliminarTe mando un fuerte abrazo.
Conchi