Entre papel y pluma,
acaba de morírseme un poema.
Lo encontré esta mañana
bañándose en el polen de mis flores.
Columpiándose en una telaraña
construida entre tallos de retama.
Lo vi, hacer piruetas y mohines
en las ramas del pino.
Y deslizarse, por un rayo de sol
hasta el cantero, repleto de alhelíes.
Tembló mi pecho ante tanta maravilla.
quise en palabras pintar mi sentimiento.
Y en la letra inicial del primer verso
se desmayó el poema aún no nacido.
Julia Cerles