domingo, 20 de septiembre de 2009

Tormenta






Imagen tomada de Internet

Extraño ardor camina por mis vísceras

cuando presiento, se acerca una tormenta
y cada quien persiste en sus minucias
y las aves se agitan y la tierra palpita.


Aguardo ver la nube negra y larga
profanando sin piedad el limpio cielo
y al viento cual caballo desbocado
desflecando a su paso su cabello


y a la nube juntando sus pedazos
rearmarse sobre estructuras muertas
y caer sobre humanas miserias
en espasmos de hembra parturienta.


Amo el relincho ronco de ese potro
que en su aliento me trae lejanías,
aromas, desde un mar de madreselvas
y haces de retamas amarillas.



Después de las tormentas de mi vida
me alzo más fuerte sobre mi osamenta,
y sigo el paso a paso de mis días,
hasta que llegue al fin, el fin de cuenta


y aferrada a las crines de ese potro
me arranque esta mortaja desteñida
y sobre su lomo azul, desnuda y alba,
sobrevuele en libertad mis ruinas.


Julia Cerles








1 comentario:

  1. Muy bien !!!
    Ver photrom.fr
    romtop.blogspot.com
    vincent-psykart.blogspot.com
    Haga su comentario

    ResponderEliminar